! Oístes Pacho, vos deberías renunciar !

Señor Alcalde Francisco Fuentes, hoy, en efecto, hoy más que nunca, pero rapidongo vos deberías renunciar. Oíste Pacho, porqué no pensás en renunciar, deberías contemplar esa maravillosa decisión.

Ponéle cuidao a lo que te voy a contar: Puallí y Puallá, o mejor como te dijera, puallí, pero no sólo en el centro histórico y alrededores del Parque Caldas, sino en todas partes, en casi todos los barrios del norte, centro, sur, oriente, del occidente, y en casi todas las comunas andan, si, imagináte andan con la promoción, sí, eso, dizque con la idea promocional que te revoquemos en las urnas, el mandato de Alcalde Mayor de Popayán.

Pero pensándolo bien, creo que los payaneses y todos los que vivimos en Popayán a la larga no necesitamos que te revoquemos el mandato de Alcalde, porque vos solito, pero solito ya te lo revocástes y de hecho ya estás revocado.

Oíste Pacho vos deberías renunciar, deberías darnos ese gusto, deberías hacernos ese inmenso favor que de verdad te lo vamos a agradecer de todo corazón, porque después de tu mandato o mejor después de tu des-mandato no creo que estés pensando en lanzarte a la reelección como Alcalde, máxime ahora que puallí andan contemplando ese proyecto de ley de pa reelegir a los Alcaldes. 

Yo no creo que vos estés pensando con la ayuda de tus asesores de Imagen en que te reelijamos como Alcalde, ni en lanzarte más adelante a la Cámara de Representantes a nombre de tu Partido Conservador.

Oíste Pacho, vos deberías renunciar de inmediato, ponéle cuidado, y hacé memoria: 

Nosotros hemos tenido Alcaldes, malongos, regulimbis, regularzongos y hasta despistaoos, pero es que vos si la sacástes del estadio, tremenda goliada olimpica, ya te ganástes, el premio mayor, el título no “honoris causa”, sino realis causa del peor Alcalde que hemos tenido en Popayán, y quizás te van a recordar con razón o sin razón, de manera justa o injusta, como el peor Alcalde que paso puahi por el Parque Caldas, y que junto con tu antecesor, de manera curiosa también de tu partido conservador, dejaron nuestra ciudad como si fuera un poblado de la pos-guerra, como si no estuviéramos en Popayán, sino en Beirut, o en Croacia o puallá en la Franja de Gaza: con todas esas calles bombardeadas y con las fachadas de las casas como si no fueran fachadas sino trincheras.

Mirá Pacho, nuestra Popayán, está convertida en Guecoyán, en Atajoyán, en Balastroyán, en Re-Parchoyán, porque dizque la están re-parchando, y la ciudad puallí algunos comentan que dizque se encuentra en proceso de transformación, pero viejo Pacho, pilas, ponéme cuidado que en lugar de transformación se halla en un proceso palpable, objetivo, ostensible, incontrastable, como te dijera, visible ante el lente de cualquier fotógrafo aficionado, en un paseo de desfiguración, de deterioro total, abandono casi, casi absoluto, y si a vos se te ocurre puallí de lanzar un concurso de fotografía con el propósito de otorgar premios al fotógrafo que registre con su lente cuál es la calle mas vuelta nada y más vuelta trizas, o cuál es el zanjón o pozo o hueco más grande: de seguro que no resultaría un solo ganador, sino muchísimos, y ese premio tocaría multiplicarlo entre vaya a saber cuántos, fotógrafos, aficionados y profesionales. Qué tremendo es ser Alcalde, cierto Pacho.

Definitivamente tenés que reconocerlo de manera pacífica, asumiendo con entereza y con sensatez las críticas, y no te vas a poner bravo por lo que voy a decir: Tenés que reconocer que te quedó grande pero demasiado grande esa Alcaldía, por eso es mejor que renunciés y que te vayás antes de que se te cumpla el periodo. A lo mejor si renunciás, quien quita que te nombren de embajador o de cónsul en algún país vecino como le ocurrió a tu antecesor.

Si vos renunciás, tené pero tené la plena seguridad que todos los ciudadanos de Popayán te lo vamos a agradecer de manera infinita, y miraremos tu renuncia como un gesto de grandeza, como un gesto de dignidad, como un gesto de valentía, y a la larga te van a perdonar los errores que cometistes. Hombre Pacho, cuando alguien no tiene idea de administrar una ciudad como la nuestra, como te pasó a vos es mejor no meterse de Alcalde.

Pero, si no querés renunciar, y si querés medio salvar ese barco que navega a raudales hacia el naufragio, ponéte a recomponer de inmediato tu gabinete, pediles la renuncia los regularzongos, y llamáte a tu administración a Secretarios de Despacho técnicos, expertos, especialistas no salidos de las ternas de los directorios políticos, sino de la academia, de la Universidad del Cauca y de otras Universidades, hacé rupturas de las lógicas de los directorios políticos, y acordáte que si no lo hacés pero ya es para ya, tu Alcaldía con toda su tripulación a la larga naufragará y se irá a pique abajo allá hacia el fondo del mar de Yanaconas, y no lo más tenáz sería que no lo  van a encontrar ni los que rescataron el Titanic. Hacélo y no vayás a esperarte hasta la Semana Santa del año entrante.

Mirá Pacho, si vos renunciás, ese sueldo que te estás ganando no lo vas a necesitar pa nada, porque vos no necesitas trabajar, mas bien, porque no renunciás y te ponés a litigar en asuntos administrativos, demandando a la Nación, o demandando al Estado, por irresponsabilidad directa o por fallas en el servicio. Claro, que si abrís una oficina y te ponés a litigar no podrías demandar al municipio de Popayán por las fallas en el servicio de tu administración ni por las fallas en el servicio de la administración de tu antecesor conservador.

Oíste Pacho, ya se viene la Semana Santa, y me imagino que ya estás reparchando las calles y tenés listas las botas pantaneras para desfilar en la procesión del martes Santo. A la larga lo mejor que podría ocurrir es que no salieras a desfilar en la procesión del martes Santo, con tus colaboradores y menos con los que les vas a pedir la renuncia. ! Huy ! no que Oso, que irán a decir los turistas nacionales y extranjeros, ojalá no vaya a ocurrir cuando vean alguno o algunos de los cargueros “que la piden en plena procesión” o se les tronchen los tobillos puallí en cualquiera desos guecos reparchaos. Hombre Pacho, vos sos un hombre bueno, calidoso, amable, afectuoso, profesional del derecho brillante, y el malo del paseo no sos vos, sino las calles, y los guecos. Pacho, Pacho, Viejo Pacho, vos deberías renunciar, hacéme caso.  

Popayán, marzo de 2014

El Portal de Shamballla